Friday 18 October 2013

(ES) BILINGÜISMO, ¿VENTAJA O INCONVENIENTE?

18-10-2013

BILINGÜISMO, ¿VENTAJA O INCONVENIENTE?

Tener la capacidad de comunicarse en dos idiomas también genera inconvenientes. Así lo ha demostrado el proyecto científico Consolider Brainglot que, desde hace seis años, ha estado centrado en el análisis de la base neurocientífica del bilingüismo.

La profesora Núria Sebastián, que forma parte de la Universitat Pompeu Fabra, ha sido la encargada de dirigir este revelador proyecto. Sin embargo, también ha podido contar con la ayuda de cien investigadores pertenecientes a varias universidades españolas.

Durante el desarrollo de esta investigación, cuyos resultados fueron expuestos en el IV Workshop on Bilingualism and Cognitive Neurosciencie, han sido examinados los mecanismos de conocimiento neurológico que posibilitan el aprendizaje de lenguajes diferentes.

Las aptitudes que el bilingüismo confiere a las personas, según el proyecto Consolider Brainglot, son las siguientes: disposición para utilizar un mayor número de áreas cerebrales y mayor adaptación frente a los cambios que una persona monolingüe.

Sin embargo, no todo son ventajas para el bilingüismo. Este análisis ha servido también para descubrir que aquellas personas bilingües, que lo sean desde pequeñas, presentan una menor eficacia en el procesamiento de información. Esto significa que la persona bilingüe está continuamente eligiendo en qué idioma habla y este acto, a la hora de expresarse, contribuye a entorpecer la emisión de las palabras.

Asimismo, esta investigación ha incluido otro aspecto que plantea una duda determinada: ¿por qué la dificultad para aprender un segundo idioma aumenta en edades avanzadas? La respuesta a esta pregunta se resuelve de modo sencillo: porque la primera lengua aprendida ha llenado un espacio prioritario en el cerebro y, como consecuencia, deja menos espacio para el nuevo idioma.

Quizá resulte evidente, tras conocer estos resultados, que también las cosas buenas pueden contener una parte negativa. No obstante, a pesar de cualquier inconveniente que pueda acarrear, el aprendizaje de idiomas representa un beneficio en sí al que no debería renunciarse.